MARTES 16 DE SEPTIEMBRE DE 2014

Hoy Alberto y Victor han contratado una experiencia de buceo seguro,  te ponen una especie de casco lleno de aire y conectado a una manguera y vas caminado bajo el mar.
Estas islas son un paraíso especialmente debajo del agua,  hay muchos corales, debían de haber muchos porque hasta hace poco pescaban con dinamita y así han destrozado bastantes.
La experiencia les gusto mucho,  especialmente a Victor, y la regalaron un CD lleno de fotos.


Por nuestra parte,  el pequeño ( que no podía bajar por la edad) y yo pasamos la mañana en la playa del hotel Almarik,  tiraos en la arena,  cogiendo corales y buscando cangrejos ermitaños.
El agua está cristalina y caliente y la arena blanca hace una postal preciosa.


Cuando llegaron los aventureros submarinos comimos delante del mar y entraron a buscar tortugas,  y las encontraron. .. Muy cerca de la costa.  A los peques les ha fascinado ver tan cerca a estos animales en libertad, y nosotros encantados de verlos tan entusiasmados.



Antes de ir a cenar hemos dado un paseo por el interior de la isla donde vive la gente local.  En realidad la única calle turística (y llena de gente) es la que bordea el mar.
La parte interna esta poco iluminada y está salpicada de hoteles tradicionales, por llamarlos de alguna manera Donde los locales alquilan los bungalows que han construido en sus patios. Estas islas en el pasado vivían de la pesca,  ahora el turismo les ha traído la riqueza,  a cambio de destrozar un poco mas su litoral...  (las tortugas lo tienen más difícil cada vez para deshovar) y perder la tranquilidad,  ya que Gili Trawangan también es conocida por la isla de la fiesta:  música chumba chumba que se mezcla con la primera llamada a la oración de la mezquita.

Sus habitantes son amables y sonrientes y les gusta hablar con los niños y los extranjeros,  unas mujeres nos dieron una torta de tapioca con coco que ser llama "opakopa" (no se como se escribe) que acababa de hacer al fuego y era crujiente y recordaba al pan de gambas.

Cenamos al lado del mar,  cerca del animado fodd market, que eran un montón de puestos de comida donde se podía comprar el pescado fresco y lo cocinaban ahí mismo,  pero. .. preferí ir a un restaurante... ya sabéis,  no se puede bajar la guardia.

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